miércoles, 24 de septiembre de 2008

... ¿O 'shea', cómo?



Como mexicana viviendo en España puedo decir que este idioma es tan rico y está ya tan "manoseado" (o... ¿baboseado? digo, por aquello de que se 'habla') que tiene muchos cambios en todos los países que lo hablan, así que, sin ir más lejos, puedo decir que, para comunicarse acá, la gente tiene que "adoptar" ciertas palabras o de plano, no se les entiende o hay confusiones con lo que uno quiere decir (se toma a grosería alguna frase inocente, etc).

Sin embargo, no creo que sea necesario dejar de ser quien se es para convertirse en un "híbrido lingüístico"... como 'nuestro' Hugo Sánchez... (gran futbolista, incluso, Pentapichichi).

El otro día estaba viendo TV y entrevistaron a una conocida cantante mexicana (no digo el nombre porque no la soporto) pero... al escucharla, me quedé "de a cuatro". Hablaba como seudo-española (eso sí, no sabía dónde van las "C" y dónde las "S") y todo lo decía así:
"Shí, o shea, esh que shoy muy felish de eshtar cashada con eshte chico y... bueno, puesh ahora que eshtoy viviendo fuera de mi paísh pues... ¡hombre!"

Y ¡¡hombre!! ¿dónde quedó la identidad?

También oí a unas personas de Ecuador que hablaban como dicha cantante... y me daba tristeza porque, a pesar de estar tan lejos de un país, (creo yo) se debe tratar de conservar, aunque sea un poquito de la identidad del lugar de donde se es. Digo, no por eso comento que la música de Lila Downs, por ejemplo, me mole mogollón. En efecto, me gusta decir que es chida, que está padre.

Ahora que hay globalización y que hay mucha emigración e inmigración, ¿por qué no conservar lo que nos hace únicos? Y de esta manera enriquecernos los unos a los otros sin dejar de ser quienes somos.

¡Chale! o... ¿será... "jolines"?